martes, febrero 14, 2006

Sigo en mi vida, camino por senderos ocultos de mis sentimientos, la vida es un recorrido, un andar , en donde uno no se puede dejar vencer y hay que seguir adelante, luchar y dar lo máximo que uno pueda dar hasta donde alcance. Pero a veces , descansamos con un ¿ por que? Y paramos ese camino, no encontramos soluciones pero sabemos que alguien mas grande que nosotros nos ayuda a caminar , a levantarnos y tener fortaleza, es en esos momentos cuando conocemos a los verdaderos mundos que nos rodean y con quien debemos meternos y con quien caminar este largo recorrido y ver los posibles horizontes.

Pero a veces siento que la sociedad llena mis vacios mas profundos y como una aguja penetra mis venas , mi sangre , mi corazon (que es fiel pero que a veces nos falla sin saber porque e inundando nuestro cuerpo de preguntas) y mi mente, haciendome quedar paralizada y descubrir que no he hecho nada en esta vida, que soy inútil a ella , que no tengo a nadie , que la soledad, depresion y angustia , quieren llenar los espacios lúgubres que no he podido llenar yo.

La muerte es el fin de una existencia fisica , para dar paso a una existencia espiritual que se enriquece en la vida , en el aprendizaje y en la experiencia.
Amanecer

La luna cándida y esplendida se despide calladamente de su amiga la noche y da paso al brillante y claro sol, que se expande por todas las fronteras, iluminando la tierra hasta los horizontes más lejanos que pueden existir, en este magnifico universo.

El sol llama a los sueños más profundos y los saca de ese aposento lleno de ideales y los conduce a un mundo infinito.

La naturaleza aprovecha este gran acontecimiento. Los animales salen de su escondite y se pasean por el suave pasto que toca sus patas delicadamente. Las flores y las plantas se envuelven en el dulce arrullo del viento y brisa mañaneros. El mar camina con las olas llevando a un abismo profundo, la felicidad y la esperanza.

Soledad anónima

Me preguntaba ¿Con quién estoy?Sera que estoy solo, no lo sé , pero sé que estoy sin nadie, me guarezco en los rincones mas profundos de mi casa, sin que nadie se de cuenta, estoy solo no tengo a nadie. La palabra soledad me llenaba de miedo y me hacía temblar del miedo; cada vez que sentía esa sensación me escondía, pero lo peor era que no sabía si estaba solo o acompañado; las pocas veces que me encontraba con alguien no lo miraba , no lo sentía , lo ignoraba , era como estar solo . La soledad anónima como la llamaba era una grave enfermedad , primero comenzaba alejándote de los amigos, y después te deja en los rincones más de tu casa.Producía un efecto indescriptible ; siempre lo sentía, pero cada vez con más fuerza, hasta que un día terminé cansado de la vida y morí. Pero sabía que esa Soledad anónima tenía nombre era: la Muerte.


Recuerdos de una casa

El sopor de la fiebre me vencía estaba agotado, no podía mover un dedo mas y mis piernas estaban encalambradas, mi esposa ya también vencida por la fiebre, yacía en la cama sin poder respirar a causa del aire contaminado.
No había ayuda alguna, solo estábamos nosotros dos solos en la casa, una casa vieja, con paredes casi a punto de caerse por la humedad, un suelo frío en el que se escuchaban las pisadas de los muertos, la sala, una sala en donde hacía mucho tiempo nadie se sentaba ni jugaba continental como todos los días, ya no se escuchaban las charlas de antes solo el silbido del aire y el eco de la poca gente que pasaba por esa casa. El comedor donde antes se hacían grandes banquetes y divertidas celebraciones, pero ahora solo veía pan y agua, de vez en cuando carne y muy pocas veces pollo. El baño, el baño estaba sin utilizar ese lugar que siempre sirvió de inodoro ahora estaba solo sin nadie que mirara siquiera el espejo, el espejo que guardaba detrás de sus paredes un tesoro que nunca se encontró y que ahora estaba muy viejo. Ahora recuerdo como era mi casa que ahora solo servía como un viejo hospital de dos ancianos que solo tenían recuerdos.

miércoles, febrero 08, 2006

Ensayo: “Noticia de un secuestro” de Gabriel García Márquez

En 1996, el escritor colombiano Gabriel García Márquez, escribió la crónica periodística “Noticia de un secuestro”. Es la historia de diez secuestros consecutivos a periodistas de alto rango social.

Los acontecimientos sucedieron en el año de 1990, época en donde el narcotráfico y la guerrilla alcanzaban su punto máximo. Época también en la que se dictó por parte del Gobierno Colombiano la ley de extradición a nacionales colombianos por el delito de narcotráfico. Surgió entonces, un grupo denominado “Los Extraditables” que estaban en contra de este dictamen; cuya cabeza principal era Pablo Escobar. Él era un reconocido narcotraficante, que quería a través del secuestro de los periodistas, ejercer una presión al Gobierno para que los juzgaran aquí en Colombia y no en Estados Unidos, por eso se oponía a la extradición. Cesar Gaviria el presidente de ese entonces, estaba llevando a cabo un proyecto de Asamblea Constituyente, para reformar la Constitución de 1886.El país estaba en un estado de corrupción, donde el dinero fácil corría por todos los canales. Ejemplo de ello, los jóvenes de Medellín que se dedicaron al vicariato por un mejor futuro. Era una guerra total, por eso Pablo Escobar justificaba sus acciones y el secuestro de los periodistas, explicando que el Cuerpo Élite de la policía había asesinado a mas de cuatrocientos muchachos de las comunas de Medellín y que nadie los había castigado. Por su lado el Gobierno no cedía ante las presiones y se mostraba indiferente.

De esta forma, vivimos el drama del cautiverio de Maruja Pachón, Beatriz Villamizar, Francisco Santos, Diana Turbay, y junto con ella fueron secuestrados cuatro miembros de su equipo periodístico: Azucena Liévano, el redactor Juan Vitta, los camarógrafos Richard Becerra y Orlando Acevedo, y el periodista alemán, Hero Buss. Cada uno de ellos vio desde su perspectiva el secuestro. El autor nos narra de una forma muy descriptiva, los sentimientos de cada uno de estos personajes, sus miedos, sus esperanzas, sus tristezas. Además cuenta, el sufrimiento de las familias en espera de sus familiares secuestrados, su angustia y sus intentos muchas veces infructuosos de rescate y también la actitud frívola e indolente de Presidente de la Republica, Cesar Gaviria.
Uno de los acontecimientos mas tristes fue la muerte de Diana Turbay por una bala perdida en combate, que la dejó sin movimiento, y luego horas mas tarde, ella falleció en un hospital de Medellín. Otra rehén que murió fue Marina Montoya, que fue vilmente asesinada y a apareció a las orillas de un rió.

A mi parecer el libro recoge una realidad del país, porque nos ayuda a ver de una forma objetiva una de las problemáticas más grandes de nuestro país: El secuestro. A través de estos personajes observamos las penosas situaciones que deben pasar todos los secuestrados. Otra cosa que me impacto muchísimo fue la reacción de los colombianos como pueblo y como nación, porque me doy cuenta que somos una sociedad que antepone la economía sobre los derechos humanos, que no nos importa la situación de los demás sino solo la nuestra, y que no somos un país capaz de progresar, porque no dejamos la historia y el pasado atrás, sino que vivimos amarrados a ellos por medio de la cadena del rencor y la venganza. Por ejemplo, hace diez años que el libro se escribió y todavía sigue existiendo el secuestro y las matanzas. Otra razón es la falta de ideas y argumentos políticos que valgan la pena, que no solo se queden en el papel, sino también en el ejercicio de la práctica, ya que la mayoría de políticos actuales son corruptos y deshonestos.

En conclusión, el dolor y la tristeza que dejan estos acontecimientos es muy difícil de remover, pero ahora no podemos pensar en eso, sino que debemos unirnos para acabar con esto, y así permitir que las nuevas generaciones vivan en el país que tanto hemos soñado.

FIN

viernes, febrero 03, 2006


Bueno, ohh sabiduria avenclaw que me acompaña, espero que les guste.